Las Fuerzas de Seguridad del Estado han detenido a 17 personas y han imputado a una más como supuestos integrantes de una red que estafó cerca de un millón de euros mediante la venta de contratos falsos de trabajo a inmigrantes que pretendían regularizar su situación en España.
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, informó hoy en rueda de prensa del desarrollo de la 'Operación Berza', desarrollada de forma conjunta por la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía.Entre los detenidos están los dos propietarios de una gestoría de Tomelloso (Ciudad Real), un padre y su hijo, quienes, en colaboración con doce empresarios agrícolas y de la construcción, también detenidos, cobraban entre 4.000 y 5.000 euros a inmigrantes marroquíes y mauritanos por un contrato laboral falso, puesto que nunca se concretaba la relación laboral establecida.
Los responsables de la gestoría utilizaban a dos 'captadores' y también ofrecían sus servicios a inmigrantes que ya residían en la provincia y que querían traer a España a sus familiares.Los detenidos pactaban con inmigrantes la cantidad de dinero que debían abonar y posteriormente redactaban los contratos, que eran tramitados ante el área de Trabajo de la Subdelegación del Gobierno de Ciudad Real por los doce empresarios.
LEER MÁS:
COMENTARIO: GOLFOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario