REPORTAJE
Un racismo de baja intensidad
La xenofobia empieza a instalarse en lugares donde se integran los inmigrantes
DANIEL BORASTEROS / JESÚS GARCÍA 03/11/2007
España no es xenófoba. Las encuestas reflejan que la sociedad ha incorporado sin grandes sobresaltos el mayor flujo de inmigrantes que ha conocido el país. Pero algunas agresiones, las dificultades de convivencia y la competencia por servicios como las urgencias o plazas de colegio empiezan a dibujar otro panorama: el racismo de baja intensidad. Una sensación latente -y ya no tan latente en zonas con alta densidad de extranjeros- de que disminuye el pastel del Estado de bienestar
No hay comentarios:
Publicar un comentario