EFE, Londres
El Gobierno británico ha dado instrucciones a los funcionarios de inmigración para que no expulsen a los estudiantes extranjeros cuyo visado haya caducado, según un memorándum de la Agencia de Fronteras e Inmigración, por el que las autoridades no deben considerar prioritaria la repatriación de esos estudiantes.
Únicamente, en el caso de que las personas hayan vulnerado otras leyes británicas o si hubiese pruebas de soborno o fraude deberán ser expulsados del país.
Un cambio legislativo introducido el pasado 1 de septiembre ha llevado a un incremento del número de estudiantes que ven rechazada su solicitud de continuar en suelo británico una vez expirados sus visados.
Fuentes del servicio de inmigración dijeron que "cientos de miles de estudiantes, incluidos muchos que no tienen intención alguna de seguir estudios aquí, estén de modo ilegal en este país, beneficiándose de una amnistía de hecho".
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