Menores atrapados en el sistema de concesión de asilo político
Instituciones - 16-04-2008 - 19:18
"Lo más importante es el bienestar de los niños"
No es raro que los niños solicitantes de asilo político hayan sido testigos de hechos traumáticos extremadamente violentos, que hayan sido víctimas de torturas o sufrido la pérdida uno de sus padres. Estas situaciones afectan negativamente a la capacidad de aprendizaje y las habilidades sociales del menor. Además, las ONGs alertan de que el 58 por ciento de los niños de entre 11 y 16 años de edad que piden asilo político muestran síntomas de padecer alguna enfermedad mental.
En 2007, los centros daneses de acogida para solicitantes de asilo albergaban un total de 466 menores de edad, que pasarán en ellos una media de 2,4 años de su vida. Según datos de la revista médica danesa " Ugeskrift for læger", el 35 por ciento de los que tienen entre 4 y 16 años presenta síntomas de padecer alguna enfermedad mental, un porcentaje que se eleva al 58 por ciento en la franja de edad entre los11 y los 16 años. Además, entre 2001 y 2007 intentaron quitarse la vida en los centros daneses de acogida 43 padres y madres.
Los grandes perdedores
Para la psicóloga Bente Reich, una de las participantes en el encuentro entre eurodiputados y representantes del sector no-gubernamental danés que tuvo lugar el 10 de abril en la oficina del Parlamento Europeo en Copenhague, vivir en un centro de acogida durante años repercute negativamente sobre la capacidad de los padres para educar a sus hijos. "Los grandes perdedores son los niños, que tienen gran dependencia de su entorno familiar", explicó.
Reich destacó asimismo que un entorno familiar desestructurado o inestable también afecta la capacidad de aprendizaje y habilidades sociales de los menores. "La mejor forma de ayudar es proporcionarles seguridad sobre su futuro", añadió.
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En 2007, los centros daneses de acogida para solicitantes de asilo albergaban un total de 466 menores de edad, que pasarán en ellos una media de 2,4 años de su vida. Según datos de la revista médica danesa " Ugeskrift for læger", el 35 por ciento de los que tienen entre 4 y 16 años presenta síntomas de padecer alguna enfermedad mental, un porcentaje que se eleva al 58 por ciento en la franja de edad entre los11 y los 16 años. Además, entre 2001 y 2007 intentaron quitarse la vida en los centros daneses de acogida 43 padres y madres.
Los grandes perdedores
Para la psicóloga Bente Reich, una de las participantes en el encuentro entre eurodiputados y representantes del sector no-gubernamental danés que tuvo lugar el 10 de abril en la oficina del Parlamento Europeo en Copenhague, vivir en un centro de acogida durante años repercute negativamente sobre la capacidad de los padres para educar a sus hijos. "Los grandes perdedores son los niños, que tienen gran dependencia de su entorno familiar", explicó.
Reich destacó asimismo que un entorno familiar desestructurado o inestable también afecta la capacidad de aprendizaje y habilidades sociales de los menores. "La mejor forma de ayudar es proporcionarles seguridad sobre su futuro", añadió.
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