Interior establece en 65 años la edad de un niño de 15 que llegó en cayuco
El bufete de abogados andaluz Fernando Osuna intenta solucionar la situación de un joven senegalés menor de edad que llegó a Tenerife en cayuco hace dos años, y que incluso pasó unas pruebas médicas, ante la ausencia de documentación, que determinaron su edad en 65 años, en lugar de los 15 que realmente tenía.
DORY MERINO/EFE, Tenerife
El bufete de abogados andaluz Fernando Osuna intenta solucionar la situación de un joven senegalés menor de edad que llegó a Tenerife en cayuco hace dos años, y que incluso pasó unas pruebas médicas, ante la ausencia de documentación, que determinaron su edad en 65 años, en lugar de los 15 que realmente tenía.
El abogado Fernando Osuna ha explicado que el joven llegó a España en una patera hace dos años, concretamente a la costa de Tenerife, y cuando la Policía lo interceptó fue internado en el centro para inmigrantes indocumentados de la isla, sin poder acceder a un centro de menores, aunque entonces tenía 15 años, ante la saturación de los mismos".
Osuna ha puesto de manifiesto el error cometido entonces al realizarle unas pruebas médicas para calcular su edad real, que no sólo no determinaron que era menor de edad, sino que calcularon que tenía 65 años.
Un error "grave" que el abogado asegura que nadie se explica, pero que pudo ser provocado por varios factores, y sobre el que el letrado ha dicho que "hemos pensado que la prueba biológica salió mal, que es lo primero que hay que pensar, pero desde luego, nadie se lo explica".
Otra posibilidad, es que hubiese "una confusión de documentos", de forma que "las pruebas médicas estuviesen bien, pero al final hubiese una confusión a la hora de plasmarlo todo en el documento final", manifestó el abogado.
Fernando Osuna aclaró que el joven "tiene la apariencia normal de un joven de su edad, de forma que no encontramos explicación al error".
Además, el letrado indicó que a los 45 días fue trasladado al territorio peninsular español y añadió que el joven ha estado "dejado a su suerte, sin familia, sin conocer el idioma y costumbres de España, viviendo de la compasión de sus propios compatriotas".
Como ha sucedido de otros miles de casos, el letrado añadió: "No sabemos las circunstancias exactas, pero sí que fue traído por la Policía en un avión o un barco y abandonado a su aventura en algún punto de la península", tal y como manifestó el letrado.
El joven llegó a Huelva, donde estuvo ganándose la vida a través de la venta de discos en la calle, tiene ahora 17 años, cumplirá 18 el próximo noviembre, y actualmente vive en un hostal de Huelva que le está costeando un compatriota suyo y que ha acudido al bufete Osuna para buscar una solución a este problema.
"Dramático caso"
El letrado se ha mostrado confiado en "encontrar una salida legal a este dramático caso".
Según los datos que maneja la Consejería de Bienestar Social del Gobierno canario, en el año 2008 fueron 813 los menores extranjeros no acompañados que llegaron en pateras o cayucos a las Islas. Este periódico intentó ayer, sin éxito, conocer la versión de dicho departamento respecto al caso concreto del menor senegalés que ha sido atendido por el bufete de abogados andaluz.
De sobra es conocido que las pruebas óseas que se practican en Canarias a los niños africanos para conocer su edad no son fiables, porque los mismos expertos señalan que tienen un margen de error de un año y medio, por arriba o por abajo, pero es la primera vez que se conoce un caso como el defendido por Osuna, donde se ha adjudicado una edad de 65 años a un niño de 15, máxime, teniendo en cuenta que su apariencia es la de un menor.
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